En Europa el cómic empieza tímidamente a entrar en los museos. Sin embargo, esta forma de expresión artística ha sido dejada de lado durante muchísimo tiempo. En Japón es diferente. Allí el manga es un arte mayor, un orgullo nacional desde casi los puntos de vista. A lo largo y ancho el país hay museos dedicados a este arte. El más importante esta en el barrio universitario de Kawasaki, en las afueras de Tokio.
En 2005 el Museo de Kawasaki organizo una gran retrospectiva dedicada al famoso estudio Clamp. La exposición mostraba los principales trabajos de las cuatro jóvenes componentes del estudio, que en unos años han conseguido revolucionar las reglas de dibujo y del discurso shojo manga.
Las cuatro jóvenes iniciaron su carrera en los años noventa con mangas que después se convirtieron en series de culto. La oscuridad y la violencia de los sentimientos humanos son el común denominador de sus obras.
En 2005 el Museo de Kawasaki organizo una gran retrospectiva dedicada al famoso estudio Clamp. La exposición mostraba los principales trabajos de las cuatro jóvenes componentes del estudio, que en unos años han conseguido revolucionar las reglas de dibujo y del discurso shojo manga.
Las cuatro jóvenes iniciaron su carrera en los años noventa con mangas que después se convirtieron en series de culto. La oscuridad y la violencia de los sentimientos humanos son el común denominador de sus obras.
Su enorme éxito en Japón y en el resto del mundo se debe tanto a sus mangas como a los dibujos animados y a los productos de merchandising.
Los personajes del estudio Clamp se caracterizan por enormes ojos de mirada profunda, caras tersas y una actitud a menudo romántica.
Cada año decenas de exposiciones itinerantes recorren el país y se instalan en estaciones de tren para recordar al gran público las principales corrientes artísticas del manga. Evidentemente Osamu Tezuca sigue siendo un maestro indiscutible de este arte.
Además en los museos, la cultura manga ha recibido honores en otros ámbitos intelectuales de la sociedad japonesa. Por ejemplo, cada vez más universidades prestigiosas del país organizan cursos sobre el arte manga. Allí se pueden aprender las técnicas de dibujo y arte de la escritura de guiones, pero también la historia de las diferentes corrientes estéticas del manga y la vida de los grandes mangakas.
Viajeros de todas las edades se sientan en los bancos para leer o releer las miles de páginas que dibujo Osamu Tesuka.
Viajeros de todas las edades se sientan en los bancos para leer o releer las miles de páginas que dibujo Osamu Tesuka.
En la primavera de 2005 se organizó en la estación de Kioto una exposición dedicada a Osamu Tezuca. Esta muestra de itinerante recorrió después durante varios meses todas las grandes ciudades del país.
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